Una didascalida en morado

Existe una pelea interna: entre dejar que los impulsos broten desde lo más profundo o simplemente apaciguar mi coraje y tranquilizarme.
Suelo perder la paciencia con mucha facilidad, sobre todo con aquellas personas con las que definitivamente no entro en congruencia; difieren tanto de mí o yo de ellos que me resulta sumamente dificil empatar caracteres o como dijo un compañero "tener temple". Creo que no se trabajar con personas después de todo.
El motivo de mi muy personal entrada surge a partir de que esa mecha que al finalizar enciende al detonador se está agotando a velocidades astrónomicas y temo que mi fiereza resurja y arruine mi supuesta paz que ahora conservo.
No debiera ser asi; conformarme debo con toda la violencia del mundo como para crear más. El caso es que me encuentro en un conflicto, con esas didascalidas que nadie lee y dejan atrás para montar lo que mejor les conviene o lo que "les sale más bonito". Pero me he dado cuenta con mi poca experiencia que escucharlas es hablar entre lineas y suponer mejores cosas y también entederlas de una manera mas inteligente.
Yo y mis problemas sociales: mi incapacidad por incorporarme , por hacerme "gente de mundo" "gente común". No puedo ser común, en realidad nadie puede serlo. No se porque se esmeran tanto en homogenizar la masa popular :/ na,na so bad!.
Pero en fin de los finales no tan definitivos...sigo aqui queriéndome controlar.

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