Borrador 1
Dea caminaba insegura entre las fúnebres lápidas que estaban recién bañadas por el rocío matutino. Sus pies quedaron atrapados en un fango pastoso que la hizo maldecir por lo bajo -¡Maldita sea! Y son mis mejores zapatos. Después de tirar enérgicamente logro liberar sus pies y continuar la búsqueda de AQUELLA tumba. -Tiene que ser por este lado del cementerio, estoy segura. Si tan solo hubiera traído el estupido mapa... Tenía que apresurarse. Pronto el celador daría su rondín diario y explicar que hacía en la zona del cementerio tan apartada y a esa hora, sería un verdadero dolor de cabeza y ella, era una pésima mentirosa. Se resignó a solo continuar caminando derecho hasta el fondo del lugar; era más que obvio que tendría que estar junto a los primeros difuntos del lugar. -Veamos: si utilizo un conjuro de seguimiento, dejaré rastros. No puedo invocar a otro muerto y preguntar, demasiado trabajo. Piensa, piensa, piensa. A lo lejos los primeros rayos diurnos marcaban el alba y eso solo